Erase un lugar no ha mucho tiempo y no muy lejano, un mundo
disparatado y surrealista, paranoico y
enloquecido; donde se apagaba la luz cuando se llegaba al hogar, donde no se
sudaba al trabajar y donde los niños ya no jugaban en la calle sino con
máquinas. Un mundo donde la televisión inducía violencia, donde se contaminaban
los ríos y donde gobernaban las personas más incompetentes que uno pudiere
encontrase en la calle. Un lugar donde la gente se ponía gafas de sol cuando
hacía gris y donde, gracias a los aires acondicionados, se iba en tirantes en
invierno y con chaquetón en verano. Aquí la gente fuma, a pesar de que saben
que puede resultar mortal.
En este mundo, el ejército es el que más se preocupaba por
promover la paz y es el encargado de conseguirle al gobierno grandes
terrenos llenos de petróleo.
Un lugar donde la élite sindicalista mantiene cenas
románticas con la élite de la patronal.
En este lugar la gente tiene como héroes a una especie de hombres
fornidos y altos, muy musculosos y rápidos. Mas todo lo que tienen de guapos y
fuertes, lo carecían en mente y alma. Hombres que la población adora e
idolatran y que se dedican a asestar patadas a un balón de cuero y correr
campo arriba campo abajo.
En este lugar, la gente está dividida en torno a quien
quiere la gente que les gobierne:
Unos apoyan a un conjunto de personas que quiere ganar
dinero sin trabajar y otros apoyan a un conjunto de personas que quieren
ganar dinero sin trabajar también, pero diciéndolo de formas diferentes (que es su esencia de diferencia). Para ponerse de acuerdo en quién gobernará
votan al candidato que diga más mentiras, y así saldrá el que les gobierne
durante unos años.
En este lugar el ladrón es absuelto y el juez es imputado.
En este mundo las cárceles pueden llegar a ser los lugares más cómodos que uno
pudiera imaginarse. Aquí la policía llega cuando se ha cometido el crimen y el
escenario está vacío.
Aquí existen personas que se asemejan zombies, muertos
vivientes, que vagan por la calle sin decir nada ni inmutarse, con un semblante
serio y del cual salen muy de cuando en cuando miradas furtivas y fatales para
el desgraciado, desgraciada que las recibiera. Personas que la única diferencia
que tienen con un arbusto es su capacidad de moverse. Seres esclavizados y
alienados que no tienen mente y viven y desviven para cumplir su misión, que es
siempre la misma: agradar al jefe. Se empieza muy distinto, han de trabajar
para llevar adelante a su familia. Pero poco a poco se esclavizan y
gradualmente se van olvidando de sus familias, amigos y seres queridos. Poco a
poco su mente es acaparada por un pensamiento vacío pero único e irreemplazable
y que hace a las personas irracionales y confusas. Carentes de cualquier chispa
de vida, son títeres manejados por otros, por unos pocos otros que son los
máximos responsables de este mundo irracional e incomprensible. Este mundo,
donde no querrás estar un segundo más, es el mío, y a pesar de todo seguiremos
aquí, desde este rincón, intentando cambiar el mundo, ora con risas, ora con
reflexiones, porque este es nuestro mejor pasatiempo ya que ´´cambiar el mundo no es fantasía ni utopía, sino justicia`` como diría nuestro conocido don Quijote.
Saludos desde Cuevas Bajas, para elblogdelnotas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario